Hoy más que nunca de lo que se trata es de ajuste. No importa en que clase de traje estés invirtiendo, si es de lana o de algodón, de dos o tres botones. he sabido de muchos tipos que compran el traje de excelente calidad pero que les queda enorme, y también he visto tipos en trajes baratos pero bien cortados que se ven extraordinariamente bien. El traje te tiene que quedar bien o no tendría caso ponérselo. La pregunta es ¿cual es el ajuste correcto y como se consigue?
Empieza desde arriba
Un buen traje debe abrazar tus hombros, no colgar de ellos. La mayoría de los hombres piensa que su talla es al menos una mas grande de la que en realidad les corresponde, digamos creen que son talla 42 cuando la verdad es que son 40. Cuando compres un traje, trata de comprar una talla menor a la que normalmente te pruebas. Cuando te pongas el saco debes tener la sensación de firmeza. Trata de pararte derecho, llamarás más la atención. Si no te queda bien en los hombros no lo compres.
Deshazte del exceso
Ten en cuenta el ancho de las mangas, un sastre puede adelgazar el ancho de las mangas y recortar el exceso de tela. Así se obtiene una figura más esbelta en general.
Que se asomen los puños de la camisa
Las mangas del saco deben llegar a la altura de la articulación de la muñeca, de manera que se vea una porción de entre 0,5 cm y 1,20 cm del puño de la camisa. Este tiene la misma función que un marco de una pintura: es el toque final de elegancia.
Reduce, reduce, reduce
El saco debe contornear tu silueta; haz que un sastre lo reduzca un poco de los lados. Eso acentuará tus hombros, ya sea que tengas hombros fuertes o no.
Cuida el factor caída
Los pantalones de frente plano, de corte esbelto y cuya pernera llegue justo a los tobillos produce una imagen limpia y te alarga la figura. Los pantalones deben rozar apenas la parte superior de los zapatos, no caer sobre ellos.
Sigue estos simples y útiles consejos y tendrás ese look que tanto deseas.
